La cuadra de caballos de Pablo Hermoso de Mendoza
Para un rejoneador, el elemento nodal de su profesión lo constituye indiscutiblemente el caballo. Entre ambos se forma un binomio con una comunión tan especial que les permite enfrentar al toro y cumplimentar las variadas suertes que caracterizan al llamado arte de Marialva. En la actualidad, el alto grado de adiestramiento que deben tener los caballos especializados en determinados tercios de la lidia, así como las largas y extenuantes temporadas en que participan a lo largo de las temporadas; demandan que cada rejoneador cuente con una cuadra amplia y suficiente para afrontar con éxito estos retos.
En el caso de Pablo Hermoso de Mendoza, el estellés cuenta ya desde hace varios años con la cuadra mas completa y variada de cuentas se mueven el en universo del rejoneo. Incluso los corceles que forman la segunda línea en el esquema de utilización del navarro, serían titulares indiscutibles para cualquier otro caballista.
Esto no es un hecho fortuito, se trata del fruto de un trabajo arduo que no conoce descansos ni vacaciones. Pablo monta en casa todos los días que no torea, en agotadoras jornadas que terminan hasta avanzada la noche, perfeccionando a sus monturas regulares y especialmente con un interés permanente en preparar y sacar nuevos caballos; acción que representa actualmente la más grande ilusión para el navarro.Todo este esfuerzo le ha permitido al coloso español renovar en su mayoría a los caballos que utiliza, contando ahora con una constelación de estrellas jóvenes, con un porvenir inmejorable, que se encuentran apuntalados por los veteranos de mil batallas que igual parecen jabatos a la hora de saltar al ruedo. A continuación les ofrecemos las fichas de cada uno de estos maravillosos caballos toreros
En el caso de Pablo Hermoso de Mendoza, el estellés cuenta ya desde hace varios años con la cuadra mas completa y variada de cuentas se mueven el en universo del rejoneo. Incluso los corceles que forman la segunda línea en el esquema de utilización del navarro, serían titulares indiscutibles para cualquier otro caballista.
Esto no es un hecho fortuito, se trata del fruto de un trabajo arduo que no conoce descansos ni vacaciones. Pablo monta en casa todos los días que no torea, en agotadoras jornadas que terminan hasta avanzada la noche, perfeccionando a sus monturas regulares y especialmente con un interés permanente en preparar y sacar nuevos caballos; acción que representa actualmente la más grande ilusión para el navarro.Todo este esfuerzo le ha permitido al coloso español renovar en su mayoría a los caballos que utiliza, contando ahora con una constelación de estrellas jóvenes, con un porvenir inmejorable, que se encuentran apuntalados por los veteranos de mil batallas que igual parecen jabatos a la hora de saltar al ruedo. A continuación les ofrecemos las fichas de cada uno de estos maravillosos caballos toreros
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